Durante la rueda de prensa de esta tarde, el primer ministro Mark Rutte y el ministro de Salud Pública Hugo de Jonge han dado a conocer nuevas medidas para controlar la propagación del virus en los Países Bajos. A partir de mañana se recomienda encarecidamente que las reuniones en casa no sean de más de seis personas, los niños menores de 12 años quedan excluidos. Todos los asistentes deberán mantener la distancia social, para lo que Rutte sugiere “quedar en un bar o un restaurante donde no hay riesgo de incumplir la medida”. De puertas para adentro no se multará a nadie, pero Rutte confía en que estas medidas se cumplirán. Sin fiestas ni grandes encuentros el Gobierno espera facilitar el rastreo de contactos, ya que “no es lo mismo tener que llamar a seis personas que a 50 con los que el testado ha estado en una fiesta”. No se restringe el aforo para las bodas y eventos, si bien se registrarán los datos personales de todos los asistentes, quienes se deberán sentar separados: “nada de polonesas y las felicitaciones a distancia” ha detallado el primer ministro. Además, se mantiene tan vigente como antes la medida de trabajar desde casa, «en contra de los rumores que circulan» ha aclarado Rutte. Los colegios de primaria y secundaria abren bajo varias condiciones: los niños con síntomas deben quedarse en casa, también si alguien de la familia da positivo. Para los adolescentes se deberá mantener la distancia social entre ellos y el profesor. De Jonge ha reconocido que el contagio entre jóvenes de 15 a 19 años es un problema y que pueden provocar brotes, por lo que “vigilaremos muy de cerca las escuelas para evitarlos, pero no abrir tampoco entraña riesgos limitados”. Ha confirmado que la cuarentena preventiva para los que han estado en contacto con alguien positivo pasa de 14 a 10 días. Al mismo tiempo, para los que den positivo y no quieran cooperar, el Gobierno espera poder imponer su cumplimiento por ley en las próximas semanas. “Sabemos que lo que pedimos es algo que no sale de manera natural, no abrazarse, no acercarse para celebrar algo juntos, pero esto es una forma enorme de solidaridad, para evitar que la situación, ahora preocupante, empeore” ha concluido De Jonge. Fuente: NOS