Parece ser que los delincuentes se han apuntado al teletrabajo, a juzgar por los últimos datos que ha compartido la unidad de cibercrimenes de la policía. Junto a un descenso del resto de delitos, han visto como los intentos de suplantación de identidad y fraude en general han subido con fuerza. De unas 100 denuncias por timos y fraudes vía WhatsApp a la semana, se ha pasado a 300. El perfil de víctima es el de una persona vulnerable en términos sociales. Las recomendaciones de esta unidad especializada de las fuerzas de seguridad pasan por tener en cuenta las valoraciones y comentarios de otros usuarios, asegurarse de que existen formas de contactar con la otra parte de la transacción, y controlar que nuestros dispositivos electrónicos estén actualizados para cumplir con los requisitos especificados. Fuente: EenVandaag