A partir de hoy, llevar mascarilla en el interior de lugares públicos pasa de ser una recomendación a una obligación. No acatar la nueva norma acarreará una multa de 95 euros. Se encuentran exentos los menores de 12 años y las personas con algún tipo de enfermedad o discapacidad para las cuales no es posible utilizarla. En los colegios de secundaria, museos, bibliotecas, teatros o cines, se podrá quitar la mascarilla al sentarse. No es así para las peluquerías y centros de belleza, donde habrá que llevarla en todo momento. En clases de educación física, danza, canto o teatro no será obligatorio su uso, tampoco en los templos religiosos. Hasta hoy, el 76% por ciento de los ciudadanos cumplían ya con la recomendación de usar este protector bucal en espacio públicos, según informa el RIVM. Fuente: NOS