La compañía neerlandesa del petróleo NAM es una empresa dedicada a la producción de gas natural y petróleo en los Países Bajos. Fue creada en 1947 por Shell y Esso para la explotación del yacimiento petrolífero encontrado en Schoonebeek, en la provincia de Drente. Esta explotación se cerró en 1995 por motivos económicos pero se reabrió en 2011 cuando nuevas técnicas de explotación volvieron a hacerla rentable. Desde entonces ha estado inyectando unos 9 millones de litros diarios de aguas residuales producto de la explotación en campos de gas vacíos en Twente. Esto supone unos 8.000 litros de productos químicos puros (fluoruro de hidrógeno, ácido clorhídrico, metanol y benceno) que terminan en el suelo cada día. Tanto los políticos como los residentes locales están muy preocupados por el almacenamiento de estas aguas y en 2016 se recogieron 30.000 firmas en Twente para intentar frenar estas inyecciones. Ahora la empresa ha solicitado a Drente poder utilizar también los campos de gas vacíos en el sudeste de la provincia.
En el parlamento el mes pasado el CDA pidió que se abriera una investigación externa independiente sobre las consecuencias de estas inyecciones y que, a su vez, el Ministro de Asuntos Económicos y Clima estudie si la limpieza de las aguas residuales podría ser una alternativa a la inyección. Por parte de la empresa defienden que la depuración de las aguas supondría un gran consumo energético y que la inyección es la solución menos dañina para el medio ambiente. Fuente: NOS