“Si hubieras prestado atención”, “es por culpa tuya”.., las víctimas y familiares de accidentes de tráfico, crímenes y desastres sufren mucho por los comentarios hirientes que se publican en las redes, afirma la organización Slachtofferhulp, al lanzar una campaña online contra estas reacciones ofensivas en Facebook, Twitter y otros medios sociales. Después de que un niño de 15 años que trabajaba como repartidor de comida a domicilio muriera en Utrecht en enero, la gente respondió preguntando qué padres pudieron permitir que su hijo hiciera ese trabajo. Jacob Sesselaar perdió a su hermano menor en un accidente de tráfico en noviembre al quedarse dormido al volante. También leyó reacciones en Facebook como “Es tan plano como una moneda de diez centavos”. Él es uno de los que participa en esta campaña ya que afirma que estos comentarios son “sal en la herida” y que está seguro de que si el que lo escribe lo leyera dos veces, no lo publicaría. Fuente: NOS