El Gobierno quiere que el RIVM tengo acceso, durante máximo un año, a los datos que se obtienen de la torres de telecomunicaciones para poder estudiar la movilidad y las aglomeraciones de la población. Para ello ha emitido este pasado viernes un decreto ley de emergencia que ha de aprobarse ahora tanto por el Congreso como por el Senado. El objetivo no es identificar ni seguir a la población sino ver si ha habido una gran concentración de personas en un punto y de qué lugares han venido, para en caso necesario poder reforzar las medidas anticoronavirus de manera puntual y solo donde sea necesario.

La Secretaria de Estado de Asuntos Económicos, Mona Keijzer, ha dicho esta mañana en una entrevista en la televisión pública que la privacidad se manejará con el máximo cuidado, y que los datos personales como nombre, dirección y número de teléfono serán eliminados antes de ser enviados al RIVM. Ha insistido en que el objetivo del decreto es que se puedan tomar medidas de control a nivel local, allí donde sean necesarias, en vez de a nivel nacional. Fuente: NOS