En una entrevista en el noticiero matinal de la cadena NOS, el máximo representante de la pandemia en el RIVM, Jaap van Dissel, ha declarado que las cifras actuales de contagios son demasiado altas como para celebrar unas Navidades en compañía de familiares. Estas se han estancado y no cree que para el 8 de diciembre el número de ingresos en la UCI sea inferior a 10 al día, margen que el Gobierno se había marcado para poder suavizar las medidas de cara a las fiestas. «Celebrar Nochebuena y Navidad juntos puede ser un catalizador de nuevas infecciones, porque luego llega Año Nuevo casi una semana después y los que se infectaron en Navidad lo propagarán más en Nochevieja. Esto daría lugar a muchos más casos en enero» ha explicado. Van Dissel se ha mostrado más optimista sobre la primavera: si las vacunas están ya disponibles y un número suficiente de personas se la ponen, considera que en verano se logrará la inmunidad de grupo necesaria para volver a la normalidad. El experto del RIVM ha afirmado que sólo un 8% de la población holandesa parecer estar inmunizada por haber pasado ya el virus y que la estrategia de dejar que el virus circulara libremente hasta lograr esta inmunidad de rebaño habría sido desastrosa: «debido al aumento de los pacientes en la UCI vimos que no era una opción realista y también resultó ser una estimación incorrecta la de que los ancianos de las residencias estarían bien protegidos contra la enfermedad» ha admitido. Un confinamiento total para extinguir completamente el virus tampoco era una opción, dice Van Dissel. «Erradicarlo por completo es casi imposible dada la sociedad abierta en la que vivimos. Teníamos que conseguir reducir su propagación de forma controlada». Sin la vacuna asegura que podríamos estar años con confinamientos parciales y temporales. Fuente: NOS