El primer ministro Mark Rutte ha confirmado que a partir del 15 de junio los que viven en Holanda podrán viajar de vacaciones a 12 destinos europeos que pasan a código amarillo, entre ellos Italia y Alemania, así como a las islas caribeñas del Reino de los Países Bajos. Otros cuatro países, España, Austria, Suiza y Francia quedan a la espera de pasar a código amarillo entre el 15 de junio y el 5 de julio. Por el contrario, tanto para Suecia como para el Reino Unido se mantiene el código naranja: sólo viajes estrictamente necesarios y guardando cuarentena si vienen a Holanda. Rutte ha sido muy preciso al aclarar que los turistas ingleses y suecos no son bienvenidos este verano, porque la situación de la pandemia en su país permanece demasiado inestable. Todo el que venga a Holanda de otros país europeo podrá pedir la prueba del coronavirus si presenta síntomas y se hará el mismo rastreo de contactos que para un residente holandés. No se permiten los viajes por vacaciones a países de fuera de la UE. En la web del ministerio de Asuntos Exteriores se puede consultar la situación actualizada de cada país. El primer ministro ha dejado claro que no habrá repatriaciones de residentes holandeses en caso de que un país o región sufra un brote del virus. Código amarillo significa: te puedes ir de vacaciones pero sé prudente.
Respecto de las manifestaciones contra el racismo en Ámsterdam y otras ciudades del país, Rutte ha condenado rotundamente el asesinato de George Floyd en Estados Unidos; ha reconocido que en Holanda también hay discriminación por raza y religión, y ha reiterado el derecho de todos a manifestarse como uno de los más fundamentales de la Constitución holandesa. Pero también ha dicho que la actitud de los manifestantes en Ámsterdam fue irresponsable, porque ha puesto en peligro de contagio a mucha otra gente al no respetar el distanciamiento social. Ha alabado las celebradas en Groningen y La Haya. Fuente: NOS
