La presión ha surtido efecto y, tras la jornada de huelga vivida el pasado martes en el sector del transporte público en Holanda, el Gobierno ha declarado su intención de congelar temporalmente la edad de jubilación en 66 años y 4 meses, en lugar de ir aumentándola según sube la esperanza de vida, como estaba previsto. También dejarán abierta la posibilidad de que las personas con profesiones físicamente muy demandantes puedan dejar de trabajar antes de los 66 años. Las negociaciones entre sindicatos y Gobierno siguen adelante y se espera alcanzar un acuerdo antes del 1 de julio. Fuente: NOS