Esta semana, los agricultores y sus tractores han aparecido de nuevo en docenas de lugares en los Países Bajos, desde el centro de las ciudades hasta las autopistas, desde las empresas químicas hasta los centros de distribución de los supermercados. Si bien han sido protestas de corta duración, se han repetido en diferentes lugares, provocando largos atascos de tráfico. Y esto pese a que en la noche del martes se había alcanzado un acuerdo con el Gobierno. De las diferentes asociaciones de agricultores, la FDF, la más radical y la que más apoyo tiene entre los agricultores más jóvenes, consideró que esto sólo era el primer paso y que las acciones debían proseguir para mantener la presión. Sí se ha desistido del bloqueo a la distribución de mercancías a los centros de distribución de alimentación, por la prohibición expresa del juez y por las multas a las que podrían enfrentarse. Fuente: De Volkskrant