Una comisión independiente investigará el ataque aéreo del ejército holandés llevado a cabo en 2015 sobre una fábrica de bombas del ISIS en la ciudad iraquí de Hawija, y que le costó la vida a 70 civiles de forma involuntaria. El Gobierno afirma que tiene la intención de compensar a la comunidad afectada por los daños directos o indirectos, inviertiendo en proyectos de reparación de ifraestructuras de agua, eléctricas, o de viviendas, pero ha declrado que no se indeminizará individualmente a las familias de las víctimas. «El ataque involucró una fábrica de bombas de ISIS, un objetivo claramente legítimo en términos de derecho humanitario de guerra. Por lo tanto, los Países Bajos son responsables, pero no de las consecuencias del ataque, por loque no están obligados a pagar una indemnización» ha declarado la ministra de Defensa Ank Bijleveld-Schouten. Fuente: NOS