A pesar del aumento del desempleo como resultado de la crisis del coronavirus, todavía hay ocupaciones en las que es fácil conseguir un trabajo. Los mecánicos y las enfermeras siguen siendo las profesiones más demandadas y el número de vacantes para ambos no ha dejado de aumentar en los últimos cinco años. Son sectores donde se vive una escasez casi estructural, es decir, la demanda siempre supera a la oferta de puestos de trabajo. La universidad de Maastricht, quien ha realizado el estudio, ha presentado un listado con las profesiones donde el desempleo es menor, y en ella figuran en tercer lugar los ingenieros electrotécnicos, seguidos de albañiles, desarrolladores de software, fontaneros y transportistas. Según uno de los investigadores, las primeras de la tabla seguramente no sufran la crisis económica que se avecina ya que se necesita una formación específica, llevan mucho tiempo con una alta demanda, y «son profesiones para las que hay que pensar analíticamente y tener habilidades sociales y de comunicación». Fuente: NOS