A partir de esta semana, las personas que soliciten asilo en Holanda y procedan de países «seguros», donde no hay un conflicto armado, serán alojados separadamente en dos centros de acogida y no recibirán la ayuda económica de 59 euros semanales que los demás solicitantes sí reciben. Además, deberán reportar su presencia a diario en el centro de acogida y su solicitud se procesará en un plazo máximo de cuatro semanas. Con estas medidas, el Gobierno holandés pretende desalentar la llegada de inmigrantes ilegales de países cuya estabilidad política hace que tengan menos posibilidades de obtener un permiso de residencia en Holanda. La medida no aplica a familias con niños pequeños, menores no acompañados y lgtb. El año pasado había en los centros de acogida holandeses aproximadamente 1.760 solicitantes de asilo de países seguros, la mayoría procedentes de Marruecos y Algeria. Representaban algo menos del 7 por ciento del total de solicitantes pero según el Gobierno, aumentan la presión sobre el sistema de obtención de asilo provocando retrasos sobre otras solicitudes de personas en mayor situación de vulnerabilidad. Fuente: NOS