Así lo han especificado en un informe al ministerio de Salud, Bienestar y Deportes el grupo de expertos que forma parte del OMT (Oubreak Management Team) del RIVM. La llamada «fase de transición» sólo podrá comenzar cuando: el ritmo básico de reproducción del virus sea inferior a 1 (una infectado contagia a otra persona) durante un tiempo considerable; el sistema sanitario, incluidas las UCI, deje de estar sobrecargado; aumenten el número de tests para poder detectar posibles positivos entre la población general cuando aparezcan los primeros síntomas; se establezcan instrumentos para analizar, también a nivel regional, los datos de pacientes infectados y sus contactos, lo que podría incluir el rastreo y monitorización de personas por móvil; se implemente un protocolo que pueda evaluar rápidamente los efectos de la relajación de las medidas, quizás involucrando a los médicos de atención primaria en el diagnóstico de un posible pico de casos. Fuente: NOS