Debido al alto número de personas infectadas, los GGD no tienen capacidad para llamar a los diagnosticados positivos ni para rastrear a sus contactos. Según ha informado hoy un portavoz de esta organización de servicios regionales de Salud, «con más de 6.000 infecciones diarias este método de trabajo ya no es posible». Muchos GGD ya habían dejado de llamar a los contactos de los contagiados, pero hasta ahora sí se había logrado informar a la persona infectada sobre su resultado positivo y sobre los pasos a seguir. Fuente: De Volkskrant