En una entrevista al diario NRC, el presidente de la Red Nacional de Cuidados Intensivos y también director del hospital Erasmus MC de Róterdam, Ernst Kuipers, asegura que mientras no haya vacuna, la presión en las UCI seguirá siendo enorme mientras la capacidad hospitalaria para atender a otros pacientes debe asegurarse. «El esfuerzo enorme que los hospitales han hecho en las últimas seis semanas ha sido para atender a los enfermos más graves de entre el 4 por ciento de infectados que hay de los 17 millones de holandeses. Todavía nos queda el otro 96% de la población» advierte, mientras explica que «acabamos de pasar el pico que temíamos y afortunadamente no tuvimos que elegir a qué pacientes atender, como ha pasado en Italia. Las 2.400 camas han sido suficientes y lo hemos logrado». Pero eso no quiere decir que la situación esté controlada. Mientras el descenso de pacientes graves por Covid-19 continúa es vital que otros que padecen cáncer o patologías cardíacas vuelvan a ser atendidos y que se reanuden los controles para diagnosticar otros nuevos. Kuipers admite que si fuese el factor médico el único que predomina, las medidas no deberían relajarse, «pero la sociedad y la economía lo necesitan». Y concluye que «hay que abrir la atención policlínica otra vez y programar las cirugías aplazadas mientras seguimos tratando a los pacientes con Covid-19. La posibilidad de un nuevo pico es real, tenemos que asumirlo. En algún momento el número de infecciones volverá a aumentar». Fuente: NRC