La cancelación de nueve de cada diez vuelos ha dejado al aeropuerto de Schiphol irreconocible. Trabajadores consultados por el diario De Volkskrant dicen no recordar nada similar ni siquiera en otras crisis que afectaron al transporte aéreo, como el 11-S, la irrupción del virus del SARS o las nubes de ceniza provocadas por erupciones volcánicas en Islandia en 2010. Situaciones como la utilización de una pista de aterrizaje para aparcar aviones son nuevas también para el personal del aeropuerto, que en momentos supera en número a los viajeros. Las cifras de pasajeros se han reducido a unos 5.000 diarios, que suponen un 2 o un 3% de lo habitual. En consecuencia de la caída del transporte de personas, el número de vuelos de mercancías se ha casi duplicado desde unos 35 diarios hasta los 60. Fuente: volkskrant.nl