En uno de nuestros artículos anteriores comentamos de pasada la existencia de los llamados Vrijplaatsen o «Lugares Libres» en los que las reglamentaciones generales del Ordenamiento Territorial se implementan de una manera más flexible. Estos Vrijplaatsen eran enclaves en los que no regían las leyes del entorno y a los que la gente huía para estar libre de la persecución política o legal. También hablamos de uno de estos, si bien a mayor escala, en nuestro artículo sobre Neutraal Moresnet.

Dentro de Holanda, los Vrijplaatsen son lugares de encuentro para personas con pensamientos y propuestas alternativas y afines, ya sea en un edificio o un terreno, en los que la comunidad que vive o trabaja en él y le da forma sin interposición del Gobierno. En los años ochenta, estos lugares, hijos de su época, eran muy populares en Ámsterdam donde ya entonces había 78 Vrijplaatsen. Poco a poco han ido desapareciendo y hoy en día solo quedan 14 en la capital neerlandesa y muchos de ellos se han reducido a centros culturales alternativos, sin llegar a ser del todo comerciales. 

Las más emblemáticos
Uno de estos lugares es Ruigoord, un pueblo a las afueras de Ámsterdam ocupado a principios de los setenta por artistas, ex-provos* y maestros, bajo la dirección del poeta Hans Plomp y el escritor Gerber Hellinga. Las viviendas vacías fueron de nuevo habitadas y se dice que el pastor de la iglesia protestante les entregó las llaves de la misma en 1973 con la esperanza de que el pueblo no fuese demolido, ya que se encontraba en medio de una zona industrial portuaria que poco a poco se iba extendiendo.
Gracias a la crisis del petróleo de ese mismo año el pueblo se salvó, ya que la industria no siguió avanzando y Ruigoord se convirtió así en un Vrijhaven (Puerto Libre) donde se podían consumir estupefacientes libremente y que se dio a conocer como colonia artística, llena de actividades culturales alternativas y festivales musicales. La iglesia se convirtió en el bar del pueblo y en coffeeshop.

Ruigoord

Uno de los conciertos que se organizan en Ruigoord, hoy un centro cultural alternativo. Foto: Sander van der Berg

Sin embargo a mediados de los ochenta el municipio Harlemmerlieden, al que pertenece, quiso eliminarlo del mapa modificando el uso del suelo con el fin de seguir ampliando la zona industrial portuaria. Tras muchas disputas se desistió de ello, pero la zona industrial fue ampliada intensivamente a su alrededor.
Actualmente no está permitido vivir en él por encontrarse en medio de una zona de alto riesgo. Las viviendas y la iglesia se han convertido en ateliers y lugares de eventos musicales.

Ruigoord

Vista exterior de la iglesia protestante dentro del espacio ocupa de Ruigoord. Foto: Timo Pisart / 3voor12 / VPRO

Otro de ellos, que también se encontraba en la misma zona industrial portuaria pero más cercano a Ámsterdam, era ADM-Werf. Este terreno en desuso pertenecía al Amsterdamsche Droogdok Maatschappij, donde se realizaban reparaciones de las embarcaciones. Su ocupación es digna de una película a lo James Bond: un día otoñal, en octubre de 1997, se acercaron dos grupos al terreno, uno por agua y el otro por tierra, cortaron las cadenas que cerraban el recinto y se instalaron en él poniendo mesas, sillas y camas. Al día siguiente llegaron unos policías a inspeccionar el recinto, dieron unas vueltas mirándolo todo y les dijeron “bueno, ya vemos que os habéis instalado aquí”. Desde entonces el terreno, de unas 40 hectáreas, se convirtió en el hogar de 125 personas, incluidas familias de músicos, cocineros, técnicos de sonido y teatro… un pueblo alternativo con su propia tienda barrial, café y huertas, que llegó a generar unas 40 empresas, entre ellas algunas de catering o del mundo del espectáculo. Tras 21 años en funcionamiento, el pasado 27 de diciembre se dictaminó que tenía que ser desalojado, después de un pleito tras otro para intentar mantenerlo.

Con el fin de evitar un desalojo como el del ADM-werf, algunos Vrijplaatsen han sido comprados o legalizados por sus ocupantes, como es el caso de Nieuw en Meer, también en Ámsterdam.
En 1988 un grupo de jóvenes ocupaba los antiguos edificios que habían sido los almacenes de municiones del Ministerio de Defensa. Mes y medio más tarde se creaba la Fundación Nieuw en Meer y en 1991 se legalizaba el uso de los edificios por medio de un contrato entre el municipio y la fundación. A partir de ese momento se comenzó con la rehabilitación y transformación del edificio en más de 80 estudios y ateliers de la mano del arquitecto Hein de Haan (1943-2015) de Casa Architects. Lo que no es casualidad, ya que Hein de Haan, junto con sus compañeros de oficina, ha sido el responsable de rehabilitar cientos de edificios en Ámsterdam, para gran frustración de empresas inmobiliarias y corporaciones de la vivienda, a quienes convenía más derribar y construir de nuevo. Hein de Haan fue uno de los creadores y el diseñador de otro Vrijplaats en Ámsterdam, De Vrijburgt en Ijburg.
Actualmente Nieuw en Meer es uno de los terrenos de arte y cultura más grande de la capital con sus 3,7 hectáreas y sus 9.000 m2 construidos en los que se alojan más de un centenar de artistas y empresas culturales. El complejo y el terreno funcionan de forma independiente sin ningún tipo de subvención, lo que facilita su derecho a permanecer.

Uno de los estudios y atelier que se encuentran hoy en Nieuw en Meer, donde todavía viven y trabajan un centenar de artistas.

El pasado 4 de diciembre tuvo lugar un debate sobre el futuro de estos Lugares Libres en Pakhuis De Zwijer, en Ámsterdam. Con la desaparición paulatina de los Vrijplaatsen como tema central, el debate trataba el acuerdo de coalición actual del municipio dentro del cual se pretende garantizar la tradición de la llamada contra-cultura que caracteriza a la ciudad y que, debido al desarrollo urbano, se está viendo amenazada y el riesgo de que desaparezca es cada vez mayor. Tras tres horas de discusión durante la cual los concejales indicaron que les parecía interesante abordar el problema, la sesión se cerró sin ningún compromiso. Este último intento por salvar los vrijplaatsen tuvo lugar en el mencionado ADM-werf, que fue demolido pocas semanas después.

*Los Provos fue un movimiento que surgió a mediados de los ’60 formado por jóvenes anti-sistema y que se basaba en la provocación. Solo duró dos años pero se hicieron conocidos a nivel nacional por sus intervenciones lúdicas. Dieron pie a otros movimientos que surgirían en los años ’70 para lograr la emancipación de la mujer, la democratización de las universidades, etc.

En Ámsterdam y alrededores, en sus jornadas de puertas abiertas todavía pueden visitarse los siguientes Vrijplaatsen, todos ellos reconvertidos en espacios culturales alternativos: